Las ideas son solo eso cuando no se ejecutan

Cuando uno comienza la universidad, uno de los grandes retos son los primeros grupos de trabajo, nadie se conoce y no sabes cómo te llevaras con el grupo que te toca desarrollar un trabajo que podría significar el aprobar o reprobar el curso.

Conocí mi primer grupo de trabajo en el campo, recuerdo estar caminando tratando de interactuar con cada uno de ellos, es ahí donde me di con la grata sorpresa que las personas que estaban en mi grupo tenían mucha experiencia práctica en el campo agrícola, 2 de ellos productores de naranja en la zona de selva, eran personas de las que aprendí muchísimo.

Ellos comentaban que las producciones podrían ser buenas algunos años, pero también existían años en que el problema no era la producción si no que no había suficiente demanda o que era tan alta la producción que el precio caía.

¿Qué pasó después?

Con el tiempo me fui enterando que en otros cultivos (anuales) este problema es más intensificado y las caídas de precios son más drásticas.

Muchas conversaciones tuvimos durante el ciclo universitario y en una de las tantas caminatas que realizábamos para llegar a los campos de la universidad se me ocurrió un IDEA, la cual expuse con una pregunta: ¿Por qué no venden jugo de naranja lista para consumo directo?

Hubo un gran silencio y luego lo demás fueron risas. Yo les explicaba que trayendo las frutas de la selva de manera directa y teniendo una pequeña fábrica de corte y exprimido podíamos presentar la idea a un supermercado o quizás a una tienda que nos ayude con el desarrollo, no era para venderlo en la calle, lo había estado pensando y estructurando, pero al final no me hicieron caso y quedo como una buena conversación.

Esta anécdota data de inicios del cambio de siglo, cuando quizás el mercado no estaba preocupado en el consumo de productos de este tipo. Luego de este capítulo nació en mi un ímpetu en entender mejor como se gestaban los negocios relacionados con el agro.

Años después en un supermercado vi que una señora con una maquina exprimía naranjas, lo embotellaba y lo refrigeraba sin preservantes, para consumo directo, con una marca registrada y con todas las normas de cuidado e higiene que se debían tener.

¿Qué se puede concluir?

Lo más importante es que el valor añadido generado podían multiplicar por 5 el precio de campo que en ese momento se manejaba.

El último año como docente de mi alma mater vi un negocio de jugos de naranja que habían colocado de manera permanente, cada vez que puedo llego a ese local para hacerme recordar que las ideas son solo eso y que lo que uno debe hacer es pasar a la acción por más barreras que se puedan manejar en el entorno y obviamente para disfrutar un excelente jugo de naranja helado.

Dicen que una de las cosas que más duele en la vida es ver tu idea en el mercado y que esta sea exitosa, pues bien, esto no se trata de mis amigos de la universidad, ni ahora de mí, esto se trata de tí.

¿Qué ideas has tenido que la has visto en el mercado con relativo éxito?.

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